28 feb 2012

Código de Etica


Desde hace tiempo busque una guía de comportamiento. Algún tipo de "Código de Etica" para cuando estas en el ministerio, ya sea cantando, en el pastorado o en algún lugar donde hables de Dios y sirvas a los demás. Debido a que no la encontré, me tome la libertad de hacer una. Pareciera obvio, pero al parecer no lo es. Espero les sirva.


- No exageres. Decir la verdad es lo que hacemos. Exagerar es mentir. Si tienes una congregación de 60, no digas que es de 600. Si al evento que hiciste llegaron 10, no digas que 10,000. Si a tu concierto llegaron 100, no digas que 700. A nadie le ayuda eso, mas que a tu ego. Tarde que temprano la gente sabe que no es verdad. Eso habla mal de ti.


- No dejes que el dinero sea tu motivación. Si ese es tu caso, es como aquel pastor que golpea y trasquila a sus ovejas para que le den toda la lana que puedan. Eso es anti-natural. Las ovejas huirán o morirán después de un tiempo. Se que los compromisos con el ministerio son fuertes, pero al hacer un evento, un libro o un disco solo por dinero te quita la libertad de decir lo que Dios te esta dirigiendo a decir. Si el ministerio no te da para comer, es un indicativo de que necesitas buscar otra fuente de ingresos y hacer el ministerio en tu tiempo libre.


- No trates de quedar bien con todos. Recuerda que sirves a Dios y no a los hombres. La gente que hoy te aplaude y llega con regalos es la misma que el día de mañana vendrá con sogas a colgarte porque no le gusto algo que dijiste.


- Tolera y acepta a otros ministros que no creen como tu. Si crees que tienes una “revelación mayor”, ora que se revele a ellos, pero no lo hagas tu. Recuerda que quizás ellos piensan lo mismo de ti. El Cuerpo es muy diverso. Todos trabajamos para la misma obra. Si somos llamados a amar a nuestros enemigos ¿Cuanto mas a los que no lo son? Las diferencias doctrinales son mínimas cuando lo comparas con el común denominador que es el poder de la cruz.


- No uses el nombre de Dios en vano. Puedes usar la Biblia para decir lo que Dios dice, pero el pararte y decir “Dios dice…” es muy arriesgado. Recuerda que puedes echarle a perder la vida a las personas con un mal consejo o si enseñas equivocadamente.


Estoy seguro que no es todo. Espero te pueda servir.

4 feb 2012

Pertenecer

Tenemos una necesidad natural de pertenecer, de ser aceptado. Crecemos con eso. En la familia, con los amigos, en la escuela. Queremos ser parte, queremos ser tomados en cuenta. “Somos” de ellos y “ellos” son de nosotros.

Hay algunos círculos que pare ser aceptado tienes que tener una lista de requisitos o pasar por ciertas pruebas. Después de que las pasas, te das cuenta que aun hay mas pruebas por superar para pertenecer. En el momento en que dejas de cumplir con los requisitos, dejas de pertenecer.

Hay una sospecha de infidelidad en todos. Cualquiera se puede “voltear” en cualquier momento. No todos pasan, solo los especiales y elegidos. Los demás no son dignos de nosotros. El orgullo corporativo te hace pensar: “El que no esta con nosotros no es nada”. Te enojas con aquellos que son infieles a la causa. Para probar tu propia fidelidad tienes que señalar a aquellos que crees que andan siendo infieles, con pruebas o sin pruebas.

La Iglesia no tiene que parecerse, en nada a esto. Jesús dijo “El que a mi viene, no lo echo fuera”. Seamos la Iglesia.